Vinos para acompañar las pastas


La tradición de los platos a base de pastas se asocia con la cocina italiana. Aunque se conoce de ciertos hábitos de elaborar platos a base de elementos similares en la cocina del Asia oriental y árabe.

Las pastas italianas específicamente, presentan la mayor versatilidad de formas y estilos, en su mayoría son elaboradas a base de sémola de trigo. Las salsas empleadas son verdaderamente excelentes y difieren grandemente en cuanto a los ingredientes.

Esto trae como consecuencia una gran variedad de sabores por lo que, en algunas ocasiones, puede hacerse difícil encontrar el vino perfecto para cada una. Vamos a intentar recrear un poco el mundo de las pastas y las diferentes opciones de vinos ideales para acompañar los diversos estilos y sabores de esta interesante cocina.
Pastas con salsa a base de tomate


El tomate ofrece ciertos tonos ácidos e intensifica el sabor de las pastas, según la tradición italiana un Chianti es la regla número 1 para este tipo de pastas. Sin embargo, como no siempre contamos con este, se aconseja emplear vinos tintos jóvenes o rosados. Un Chianti también sería perfecto con pastas que contienen salsas a base de hongos.
Pastas con pescados y mariscos


La tradición afirma que el vino blanco es perfecto para los derivados marinos, en este caso se aconseja un Chardonnay, Sauvignon Blanc o incluso un buen Champagne seco.
Pasta a la bolognesa


La salsa bolognesa, a base de carne, enriquece el sabor de las pastas. De esta forma se aconseja un vino tinto que pudiera ser joven pero de crianza sería el más indicado.
Pastas con salsas blancas


Las salsas blancas en las pastas tales como carbonara y alfredo serían perfectas si estuvieran acompañadas de un magnífico Viognier. Con sus tonos florales y baja acidez es la combinación ideal para este tipo de pastas de sabor suave.
Pastas al pesto


Me encanta este estilo pero sabemos que ofrece un sabor característico y diferente a las pastas. Además, presenta intensos aromas provenientes de la albahaca, que se complementan con las nueces, el queso y el aceite de oliva. Es por eso que se consume preferiblemente acompañado de un vino blanco con crianza.