Algunos mitos del vino
Alrededor del vino se han construido muchos mitos. Todos crecemos con ciertos preconceptos sobre los vinos y algunas características que pensamos que son así sin cuestionárnoslo demasiado, cuando en realidad quizás no sean ciertas. De derrumbar estas malas ideas se trata este post, porque una cosa es lo que creemos que es verdad y otra cosa totalmente distinta es la verdad.
Uno de los grandes mitos está asociado a la calidad del vino y sus “piernas”, es decir, los zurcos de vino que quedan contra las paredes de la copa cuando la agitamos. Mucha gente dice que si el vino queda contra las paredes de la copa esto es símbolo de su buena calidad. Pero en realidad esto ocurre porque el alcohol se evapora y el líquido remanente baja por los costados. Por lo tanto, esta es una simple señal de que el vino tiene alcohol, nada más.
Otro gran mito es el pensamiento popular que dice que las botellas que dicen “Reserva” son mejores. En Italia y España esta palabra está bien utilizada, ya que da prestigio al vino y está protegida por ley. Pero en otros paises se utiliza la palabra solo para fingir un prestigio que probablemente no tienen (por ejemplo, en Estados Unidos se puede utilizar la palabra “reserva” sin necesidad de ajustarse a ningún estandar en particular). Por lo tanto, hay que hacerle caso a esta denominación solo si se trata de países donde la palabra es legítima y realmente significa algo.
Tercer mito muy difundido, pero falso: Decantar es siempre la mejor idea. ¿A quién no le gusta el ritual de la decantación? no creo que a alguien le parezca una mala idea. Pero lo cierto es que hoy en día la elaboración del vino no deja tantos sedimentos en él, por lo que el proceso ya no es necesario, sino más bien estético.
Cuarto mito (que por cierto detesto escuchar): importa la cosecha. Mucha gente habla sobre lo bien que salió tal cosecha de tal región de tal año, pagando precios astronómicos solamente por la añada o porque esa partida fue calificada por los expertos como una excelente cosecha. Lo cierto es que incluso en los llamados “malos años” se pueden encontrar vinos de excelente calidad. Lo mejor es ahorrar mucho dinero comprando vinos que incluso sean de malos años.
De los mitos más detestables es el asociar al vino rosado con el sexo femenino. Muchos hombres conservadores prefieren no tomar vino rosado por miedo a que lo califiquen de afeminado. Hasta no hace mucho se decía que el vino rosado era para los principiantes porque es un vino dulce. En realidad el vino debe su color al poco contacto con la piel de la uva en su proceso de vinificación y muchos vinos de altísima calidad son rosados.
Hay que derribar los preconceptos que no nos dejan disfrutar mejor el vino. Recordemos que lo que importa es nuestro paladar, y que este siempre es el último en tomar la decisión.
Vía | honoluluadvertiser
Publicado por
FI
en
15:37
Enviar por correo electrónicoEscribe un blogCompartir en XCompartir con FacebookCompartir en Pinterest
Etiquetas:
Curiosidades