El pH en el vino
Como muchas sustancias, el vino tiene un nivel de pH. El pH en el vino determina su acidez. El nivel de pH va aumentando a lo largo del ciclo de maduración de la uva, y a medida que aumenta este nivel, la acidez disminuye. Este nivel sirve para saber cuál es el momento justo para la vendimia.
Pero aclaremos de qué se trata esta sigla: El pH es el potencial de Hidrógeno que posee una sustancia y su cantidad determina la acidez o basicidad de esta. Se mide en una escala del 0 al 14, siendo 7 el punto neutral. Las sustancias con un pH menor a 7 son consideradas ácidas y las de pH mayor a 7 serán básicas (o alcalinas).
En las uvas el pH final puede situarse entre 2,9 y 4. Los vinos blancos tienen un nivel de pH entre 3,1 y 3,4, mientras que en los vinos tintos está entre el 3,3 y el 3,6. Como el pH es mayor en los vinos tintos es que podemos determinar que el vino tinto es menos ácido que el vino blanco.
Los vinos con pH bajo resultan más astringentes y ácidos, mientras que los de pH alto tienen un mayor riesgo de oxidación de los antocianos (vinos tintos con tono marrón sin ser a causa del oxígeno durante el envejecimiento) y mayor riesgo de que se desarrollen microorganismos no deseados.
Como vemos, el pH puede determinar muchas características en cuanto al sabor del vino, además de ser un dato muy importante para decidir si la uva está en condiciones de comenzar la vinificación.