En principio les voy a comentar un poco de cómo el vino llegó a Galicia, éste lo hizo con los romanos. Dentro de los monasterios, los abades enseñaban técnicas, adecuaban variedades e imponían el cultivo de la vid.
Durante los comienzos del mediovo, el vino cumplía una función de garantizar una buena sanidad, ya que esta era un época donde los alimentos transmitían pestes y enfermedades varias; pero también se utilizaba como actividad económica.
A mediados del siglo XIX, Galicia llegó a obtener cincuenta mil hectáreas de viñedo, mientras que cuando hoy en día sólo cuenta con más de treinta mil hectáreas. Tambien se destaca que en el año 1890 se llevó a cabo una exportación de ochocientos millones de litros de vino.
Así, con todo esto, Galicia impulsó vinos que actualmente conllevan cinco denominaciones de origen: Monterrei, Rías Baixas, Ribera Sacra, Ribeiro y Valdeorras.
Las primeras denominaciones de origen mencionadas son producidas en la zona suroriental de la provincia de Orense; cuentan con un clima seco y continental.
En esta zona se cultivan las uvas blancas de verdello, doña branca, monstruosa y verdello louro, y sus características son que se consideran vinos ligeros, armáticos y dorados; en cambio las variedades de vinos tintos son: bastardo, tinta fina, mencía y araúxa, que también son ligeros, equilibrados y de una graduación media.
En cambio, los vinos de la Ribeira Sacra, son de muy antigua tradición, pero hay que decir que su denominación de origen surgió en el año 1996.
Se considera que la zona donde se encuentra esta denominación tiene un clima atlántico de transición bastante influenciado por los ríos.
Me parece importante mencionar que los de Ribeira Sacra “están al frente de los tintos gallegos”, ya que en total se producen 45.000 hectolitros de tintos y cinco mil de blancos.
Con respecto a la denominación de origen Ribeiro, la zona donde se cultiva tiene un clima húmedo y templado. Sus vinos son limpios, brillantes, jóvenes y muy armáticos.
Por último, quiero decirles que en Galicia no sólo se cultivan estas cinco denominaciones de origen, sino que hay pequeños lugares donde también se cosechan vinos de buena calidad.
Vía| revistaiberica
