Una de las maneras para servir el vino


Los vinos alemanes son convenientes para cualquier ocasión: desde una reunión casual hasta una elegante fiesta. Son estimulantemente frescos y ligeros, vinos para tomarlos con cualquier comida. Pero, recuerda que el vino y los alimentos son “socios”, y como tales, cada uno debe complementarse e intensificarse con el otro. Al planear tu comida, anticípate a servir aproximadamente seis copas de vino de cada botella.

Los vinos alemanes hay que servirlos aproximadamente a 10 grados centígrados. Los vinos rosados son más ricos un par de grados menos fríos, mientras que los vinos tintos deben degustarse a aproximadamente 18 grados centígrados. Un vino demasiado frío o demasiado templado no tiene fragancia ni sabor.

Cuando abras una botella de vino, quítale la cápsula de lámina de plomo que proteje el corcho y limpia la orilla de la botella con una servilleta. Después saca el corcho. Sirve el vino en una copa de cristal transparente, que ayude a mantener el aroma y el color. Nunca llenes una copa más allá de la mitad.


Una copa más angosta en la parte superior ayuda a mantener el bouquet (perfume) y permite mover el vino con más facilidad en el momento de catarlo.

Creo que estos consejos a todos nos sirven de ayuda al momento de servir un buen vino.